Las ventajas económicas de la hiperconvergencia para las PYME
Las infraestructuras informáticas hiperconvergentes son aquellas que incluyen capacidad informática, estructura de red y almacenamiento en un único dispositivo. En la práctica, se dispone de todos los componentes esenciales de una estructura informática corporativa en un dispositivo "lógico". Este milagro es posible gracias a que todos los elementos que hemos mencionado están "definidos por software", es decir, definidos no por los dispositivos que componen físicamente la máquina, sino por una estructura de software que define cómo debe funcionar cada elemento. Esta estructura tiene muchos méritos, y entre los más importantes está el ahorro en su gestión en comparación con una arquitectura tradicional.
Por qué ahorrar con la hiperconvergencia
Aunque la infraestructura en sí tiene un coste considerable, la hiperconvergencia ahorra mucho en términos de gestión y actualización porque reduce drásticamente las competencias necesarias para su funcionamiento. Como todo está definido por software, de hecho, cada actualización de las máquinas puede gestionarse sin necesidad de formar a alguien en el uso de los nuevos productos.
Ahorro en almacenamiento
Un caso típico y evidente es el del almacenamiento. Cuando es necesario añadir capacidad de almacenamiento a una infraestructura informática tradicional, se suele añadir un NAS que hay que configurar y situar en el contexto de la red. Entonces hay que empezar a buscar el dispositivo más adecuado, comprobar que sus características son compatibles con el resto de la red, instalarlo e insertarlo en el ciclo de producción.
Con una infraestructura hiperconvergente, todo lo que hay que hacer es coger una unidad de almacenamiento compatible y añadirla a la máquina. Todo lo demás se gestiona por software, sin problemas de compatibilidad, peculiaridades de gestión, solicitudes de controladores especiales o puertos específicos. Lo enchufas y funciona. Esto evita tener que formar a una persona en un producto cada vez que hay una actualización o estar atascado en productos heredados para asegurarse de que todo funciona, lo que limita el potencial de la infraestructura.
Ahorro en infraestructura de red
Del mismo modo, la función de red definida por software permite una gestión extremadamente ágil de la parte de red, simplificando su segmentación (una de las operaciones más importantes hoy en día para la seguridad informática) y reduciendo al mínimo la parte de hardware que debe gestionarse individualmente. Todo se hace desde la consola principal, con la aplicación de políticas y la supervisión del rendimiento a golpe de ratón. Sencillamente, el tiempo perdido en llegar a los dispositivos de red dispersos por la oficina se reduce drásticamente, al igual que el tiempo necesario para definir nuevas áreas y reglas de gestión.
Ahorro en la gestión de la potencia informática
Disponer de una gestión centralizada e interna de la potencia informática permite implantar numerosas soluciones de optimización de recursos. Se pueden crear fácilmente estaciones VDI y aplicaciones en contenedores, lo que reduce la necesidad de licencias de software y sistemas de seguridad, ya que hay menos puntos finales y puntos de acceso que controlar.
El ahorro cuando ataca un ransomware o un error humano
Por último, no hay que subestimar que las infraestructuras hiperconvergentes como las de Syneto pueden recuperar los archivos almacenados en cuestión de minutos, volviendo a funcionar a pleno rendimiento incluso en caso de ataque de ransomware o error humano grave que borre o inutilice todos los datos. Gracias a la gestión del software de almacenamiento, de hecho, cada sistema implementa un sistema de recuperación que no puede ser atacado por malware u operaciones incorrectas, garantizando una recuperación muy rápida de lo que se ha perdido.